Juez de Investigación Preparatoria de la Corte Superior de Justicia del Callao señala que en el 2022 recibieron más de 200 denuncias por este ilícito.
El delito de extorsión es sancionado, de acuerdo con el Código Penal, conforme a las agravantes que puedan verificarse en el proceso, con penas privativas de libertad de entre diez años hasta cadena perpetua, la máxima sanción establecida.
Así lo afirmó el juez del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria Transitorio de la Corte Superior de Justicia del Callao, Lolo Fernando Valdez Pimentel.
“El ilícito de extorsión es hacer el uso de la violencia, causar daño a alguien, principalmente, víctimas con características de tener un considerable ingreso económico, con la finalidad de obtener un beneficio de cualquier índole, siendo mayormente económico”, sostuvo.
Así, se dan diversas modalidades de extorsión: el uso de la violencia, causando daño como explosionar algún artefacto químico en un inmueble; o mediante amenaza, hacer seguimiento, “centrar” y enviar mensajes intimidatorios.
“Por ejemplo, el extorsionador observa un negocio de botica o restaurante que le va bien, y exige al propietario que tiene que pagar un monto mensual para que siga operando. Es decir, el sujeto amenaza con hacerle un daño con la finalidad de que se le pague cupos de manera mensual”.
El juez refirió que la pena a nivel básico va de 10 a 15 años, en tanto que al concurrir agravantes, es decir si es contra un funcionario o si existe criminalidad organizada y se usan armas de fuego, se incrementa entre 15 y 25 años de prisión.
Cuando se presenta el secuestro extorsivo, es decir, privar de la libertad a alguien para pedir rescate y si este rehén es un menor de edad, persona con discapacidad o sufre lesiones graves, la pena es de cadena perpetua.
Valdez Pimentel indicó, asimismo, que es esporádico que una sola persona extorsione. La regla es que tres o cuatro personas con un plan coordinado extorsionen a las personas o negocios de una zona para pedir cupos.
Cifras relativas
El juez señaló que, de acuerdo con las cifras de la Policía, en la región Callao, en el 2020 debido a pandemia del covid-19 se habían reducido a 47 las denuncias por extorsión, el 2021 se incrementó a 90 y en el 2022 hubo más de 200 casos.
Sin embargo, aclaró que estos números son relativos debido a que estos delitos se dan en la sombra, porque muchas personas que son extorsionadas no denuncian.
“En el Callao se dan tres tipos de extorsionadores, los que dicen que dan seguridad y exigen un cupo mensual, los que afirman que estás en su zona y dicen que protegen negocios y otro vinculado a extorsión a trabajadores o responsables de las obras de construcción”, aseveró.
Ante estos casos, el juez instó a la población agraviada a denunciar ante la fiscal o la Policía.
“Sus denuncias serán con medidas de protección y el nombre del agraviado quedará en reserva para evitar riesgos; en tanto, la justicia actuará como corresponde”, puntualizó.
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Fuente: El Peruano
